“Estoy muy mal”
El Tolo Gallego, al borde del llanto, no encontró
explicaciones para lo que pasó. “La verdad no lo puedo creer”, soltó
luego de la suspensión del partido por las bombas que cayeron desde la
popular de Independiente.
Dentro de la cancha las cosas no estaban saliendo bien.
Independiente dominaba, manejaba por mucho margen la posesión y
territorio, pero Belgrano encontró la diferencia con el gol de Jorge
Velázquez. Así llegó del descanso, Américo Rubén Gallego habló con sus
jugadores y el Rojo esperaba ser efectivo en su cancha. Sin embargo, el
rival salió desde el propio riñón y el partido se suspendió porque
cayeron bombas de estruendo sobre Olave. En ese instante, el Tolo pidió a
gritos y gestos que se termine, pero no lo escucharon y siguieron
tirando. “Estoy muy mal”, pudo largar el DT antes de entrar al vestuario
y al borde del llanto.
El entrenador intentó bajarle temperatura a los hinchas, porque sabía que se podía venir algo peor. Por eso, luego de las dos primeras bombas que cayeron, caminó hasta ese sector de la tribuna y les pidió que terminen. Pero ni a él lo escucharon: cayó otra y Laverni mandó a todos al vestuario. “Se suspendió. La verdad no lo puedo creer, pero…”, soltó Gallego, agarrándose la cabeza.
Fuente : Olé
El entrenador intentó bajarle temperatura a los hinchas, porque sabía que se podía venir algo peor. Por eso, luego de las dos primeras bombas que cayeron, caminó hasta ese sector de la tribuna y les pidió que terminen. Pero ni a él lo escucharon: cayó otra y Laverni mandó a todos al vestuario. “Se suspendió. La verdad no lo puedo creer, pero…”, soltó Gallego, agarrándose la cabeza.
Fuente : Olé
No hay comentarios:
Publicar un comentario